Todo empezó en el año 2.007. En aquel momento, los promotores de Classora (Iván, Diana, Juan y Diego) estábamos convencidos, cada uno por su lado, de que nos gustaría encauzar nuestro futuro a través de una empresa propia. Habíamos sido compañeros en la Facultad, y por casualidades del destino, volvimos a coincidir unos años más tarde en la Escuela de Negocios, cursando un Máster en Dirección de Empresas TIC.
Aparte de la formación, ya teníamos unos cuantos años de experiencia trabajando por cuenta ajena: Iván era consultor en Business Intelligence, Diana se había especializado en Sistemas de Información Geográfica (GIS), Juan era desarrollador web y Diego era el responsable de los Sistemas Informáticos de un Hospital. No formábamos un equipo totalmente multidisciplinar, pero nos complementábamos bien y teníamos muchas ganas de emprender y probar cosas nuevas. Así que la decisión de iniciar un proyecto conjunto era cuestión de tiempo.
Curiosamente, en esa época nos dimos cuenta de dos detalles importantes: el primero era que en Internet había una carencia bastante clara, así como una demanda emergente, de proyectos con información estructurada (todavía se empezaba a hablar del concepto de Web Semántica). En segundo lugar, debido a nuestra trayectoria trabajando para la empresa privada y para la administración pública, reparamos en que ya teníamos el know-how suficiente como para crear la semilla de un proyecto capaz de integrar automáticamente información de varias fuentes públicas de Internet. Nuestro objetivo era conseguir atesorar grandes volúmenes de información estructurada sobre los que poder crear herramientas semánticas y aplicar técnicas de BI, GIS, datamining… etc. que, hasta el momento, estaban reservadas casi en exclusiva para los sistemas internos de empresas y corporaciones.
Así nació Classora. Era una idea totalmente nueva, no la copia de un proyecto existente. Era una empresa ambiciosa, ya que desde el primer momento pensamos que Classora no tenía por qué limitarse únicamente a las fronteras de nuestro país. Pero sin duda era un proyecto que nos venía grande: necesitábamos un período de desarrollo bastante largo y, por supuesto, una inyección económica que nos permitiese llevarlo a cabo con solvencia y garantías.
Tras varios viajes por España y muchos desengaños, a finales de 2.009 llega nuestra primera alegría: Classora fue elegida para participar en un viaje de negocios a Silicon Valley, financiado por Banesto y el ICEX. Esta iniciativa, denominada «Global Business Trip», busca proyectos tecnológicos en todo el país que sean altamente escalables, y su objetivo es poner en contacto compañías nacionales con la meca de la tecnología a nivel mundial. Gracias a este viaje tuvimos la oportunidad de hablar con empresas punteras como Google o Wolfram Alpha, así como con la prestigiosa Universidad de Stanford. El resultado para nosotros fue altamente satisfactorio, no sólo por el interés que suscitó el proyecto, sino porque conseguimos establecer enlaces interesantes en Estados Unidos para realizar un seguimiento pormenorizado de nuestros progresos.
Pero de vuelta en España, la crisis económica estaba azotando más que nunca. Según los expertos, estábamos ante uno de los peores escenarios de la historia para buscar financiación, sobre todo para un proyecto que implicaba cierto riesgo como el nuestro. Increíblemente, en medio de esta desalentadora situación, tuvimos la fortuna de reunir a dos inversores interesados en financiarnos de manera conjunta. Pero la solución definitiva llegó cuando conocimos a Jacobo Lázare, otro emprendedor de Internet del que tenemos mucho que aprender. Paradojas del destino: habíamos recorrido miles de kilómetros, incluso habíamos llegado al otro extremo del mundo, y al final encontramos al inversor ideal al lado de casa. Lo mejor de Jacobo es su calidad humana y su contundente trayectoria lanzando proyectos de éxito en Internet. Sin duda era la persona que mejor nos podía complementar.
Y ahora ha llegado el momento de lanzar Classora Knowledge Base (el portal público que contiene gran parte de los datos recopilados), de comprobar si estábamos en lo cierto haciendo una apuesta tan fuerte por nuestro proyecto. Sabemos que hemos escogido un camino diferente, que somos una iniciativa completamente atípica en España. Sabemos que, en el peor de los casos, siempre nos quedará todo lo que hemos aprendido (que puede ser bastante más de lo que hubiésemos aprendido por cuenta ajena). Pero aún así, en estos momentos previos al lanzamiento no podemos evitar sentir una terrible combinación de ilusión y miedo. Esto de ser emprendedores ha resultado mucho más duro de lo que habíamos imaginado en un principio.
En fin, deseamos que os guste Classora y que todo el trabajo que hemos realizado pueda resultaros útil en algún momento. Y por supuesto, esperamos vuestro feedback.
Como ya os tengo dicho en persona me alegro un montón por vosotros y por ver como en Galicia también somos capaces de sacar adelante proyectos de fuerte componente tecnológico.
Espero que la apertura al público del proyecto sea agradable, emocionante y que sobretodo tengáis la paciencia suficiente para ir puliendo y mejorando todo día a día 🙂
¡Un saludo!
Me pasa como a Adrián, quizá porque todos somos gallegos :P. Espero que el lanzamiento proporcione ese empujón que le falta y esa inyección de usuarios, tráfico y moral que venís buscando desde hace tiempo. ¡Muchísima suerte vecinos!.
Me resultó «curioso» leer que la parte de consultoría en Galicia absorvía tantísimo tiempo… Supongo que estaría más enfocada a desarrollos, evolutivos o mantenimientos y no a infraestructuras o sistemas. En cualquier caso, me alegra (y mucho) ver que vamos evolucionando, a ver si algún día es posible volver «a casa».
Mucha suerte y mucho ánimo 😀
Suerte, habéis recorrido una gran camino y ya estáis ahí ahí, ánimo!!! Va a ir todo muy bien, ya lo veréis!
Enhorabuena!
Lo bueno se hace esperar chicos…..me alegro que no os desanimarais en vuestro camino, en España siempre están poniendo trabas cuando alguien quiere emprender algo, en Estados Unidos te puedes montar una empresa en 24 horas y aquí ya sólo por trámites burocráticos te hacen esperar meses….me alegro que abrieseis fronteras con vuestro proyecto, sin duda creo que es muy muy interesante, el tiempo lo dirá….un abrazo.
Moita sorte e moitos animos!!! 😉
Creo que todas la gente de Internet y startups de Galicia tenemos que estar muy contentos por tener a Classora entre nosotros 😉
Saludos!!
Muchas gracias por los comentarios y por los ánimos Adrián, Oscar, Joker, Rodolfo, Víctor y Andrés.
Adrián: coincidimos contigo, ojalá sea agradable y emocionante. De paciencia estamos armados 😉 suerte con erasmusu.com!!
Oscar: trabajando con vosotros todo es posible. Sois la primera división nacional, así que… vamos a por todas!! 🙂
Jocker: efectivamente, la consultoría estaba especialmente dedicada a nuevos desarrollos y consumía mucho más tiempo del deseado.
Rodolfo: muchas gracias por el apoyo, y muchísima suerte con pleiteando.com!!
Víctor: cierto, en España estas cosas se vuelven demasiado cuesta arriba. Tenemos que acostumbrarnos a vivir con las dificultades y conseguir superarlas. Así después tendremos mucho más mérito… 🙂
Andrés: en Galicia tenemos suerte de tener a gente como vosotros que, sin rendiros, estáis luchando contra viento y marea para sacar adelante vuestro proyecto. Muchísima suerte.
Me alegra que haya iniciativas tan buenas en Galicia. Hace falta un sector TIC fuerte.
¡Muchas gracias Iago! En eso estamos, intentando aportar nuestro granito de arena para que el sector TIC se vuelva un poco más fuerte. Un abrazo!
no os conozco personalmente, pero ya tenéis un fan más. Gente como vosotros es lo que necesitamos. ¡Mucho ánimo!.
Mucha suerte y un abrazo ¡¡¡
Alvaro, Luis, muchas gracias por vuestras palabras de apoyo. Un abrazo!